Grecia      Pagina 2

Civilizaciones Antiguas                  Proyecto Salón Hogar

Volver

Origenes/Recursos Economia/Grecia Arcaica/Polis El Atica/Esparta/Cultura
Edad de bronce La gran colonización griega Los Persas
Los pueblos del mar Las tiranias La Pentecontecia
Edad oscura Jonia/Corinto/Atenas Hegemonias/Esparta/Tebas
Macedonia/ colonias griegas

El tránsito a la Edad del Bronce

En Grecia la Edad del Bronce comenzó en torno al 3000 a.C. y concluyó a finales del segundo milenio, pero hay que tener en cuenta el hecho de que la península helénica nunca constituyó una entidad aislada, sino que estuvo incluida dentro del ámbito de la denominada Civilización Egea, la cual estaba definida por un espacio en el que se daba un clima, suelo y recursos naturales similares, que propiciaron unas respuestas adaptativas muy parecidas. Por su situación geográfica, el mundo egeo era el puente natural entre Egipto y Próximo Oriente, y entre Europa oriental y central.

La Civilización Egea estuvo formada por unos pobladores que compartían unas características culturales más o menos homogéneas, pero con importantes rasgos distintivos entre sí, propiciados, entre otros factores, por las dificultades de comunicación que imponía el abrupto relieve. La Civilización Egea forma parte de la Edad del Bronce griega o lo que es lo mismo, se localiza en el tránsito entre sociedades neolíticas y otras con un empleo de la metalurgia avanzada.

¿Qué motivó en el mundo egeo el paso de las comunidades neolíticas a la Edad del Bronce? Una multitud de teorías ha tratado de dar respuesta a esta complicada pregunta, pero en la actualidad la que goza de una mayor aprobación por la comunidad científica es la de la migración de grupos más desarrollados desde la regiones de Anatolia y sirio-palestina, los cuales darían el impulso definitivo al largo proceso evolutivo de las comunidades autóctonas. Según esta teoría, las poblaciones autóctonos habrían alcanzado ya un alto grado de desarrollo que las hizo receptivas a los nuevos adelantos traídos por las migraciones.

La teoría difusionista de Gordon Childe también ha contado con numerosos apoyos, Childe sostuvo la teoría de que los adelantos metalúrgicos alcanzaron Grecia por medio de los contactos con otras culturas más evolucionadas que serían propiciados por el intenso tráfico comercial.

Una tercera teoría, defendida por Renfrew y conocida como teoría de sistemas, se opuso frontalmente a las dos anteriores y defendió la evolución autóctona como camino para alcanzar los adelantos evolutivos de la Edad del Bronce.

De una forma o de otra, esta denominada Civilización Egea se desarrolló en cuatro vías paralelas en torno a la cuenca del mar Egeo. Los historiadores modernos han establecido una nomenclatura para dichas vías, pese a que la misma no es más que una mera convención no uniforme entre los historiadores; la Civilización Cicládica, Civilización Troyana, Civilización Cretense o Minóica y Civilización Heládica o Micénica.

Para el desarrollo de la Civilización Egea, en todas sus diversas fases, no se ha logrado establecer un cuadro cronológico consensuado y definido, por el contrario, existe la posibilidad de establecer cronologías relativas comparando lo acontecido en cada una de las cuatro regiones de desarrollo. Pese a ello, en el presente artículo seguiremos la cronología clásica establecida por A. Evans por la cual se dividen los distintos períodos, de forma bastante rígida, en tres fases: Antiguo, Medio y Reciente, para lo referido al minoico, micénico y cicládico; mientras que para Troya se emplea la numeración romana hasta donde sea necesario.

A comienzos del tercer milenio se empezaron a producir una serie de importantes cambios en todo el ámbito egeo. Las ciudades aumentaron su tamaño, la cerámica se perfeccionó y diversificó, al tiempo que el comercio se expandió por las zonas periféricas de este ámbito cultural. Parece ser que el Bronce Antiguo fue para el mundo egeo un período de paz y prosperidad, así se desprende de la ausencia de fortificaciones y del auge comercial. A partir de aproximadamente el año 2500 a.C. la isla de Creta sufrió una aceleración cultural sorprendente, parece ser que impulsada por la conjunción del desarrollo interno con elementos externos fruto de la emigración. Las Cícladas se convirtieron en el gran centro proveedor de materias primas, por lo que al orientar sus actividades hacia el comercio de las misas se alcanzó un elevado nivel de desarrollo. En lo que se refiere a la Tróade, este período se correspondería con los niveles I a IV de Troya, cuando la ciudad se hizo con el control de la ruta marítima del Helesponto.

El Bronce Medio, ante una casi total falta de información arqueológica, parece ser que estuvo marcado por la llegada a Grecia de nuevos contingentes de población y la correspondiente integración étnica y cultural de los mismo con el sustrato precedente, mientras que en Creta se continuó, a lo largo del Bronce Medio (2000-1700 a.C.), el desarrollo iniciado anteriormente y se realizó la construcción de los primeros palacios. Grecia continental mostraba un desarrollo considerablemente menor. Las Cícladas, que en el Bronce Antiguo habían tenido un elevado desarrollo cultural, parece que sucumbieron durante el Bronce Medio a un etapa de decadencia cuyo origen aún no ha sido aclarado; si se sabe que su comercio cayó en manos de los cretenses y que pese a perder la iniciativa económica, su nivel de vida no decayó de forma significativa. En Troya en estos momentos surgió el famoso nivel VI, el más importante de la ciudad y el de mayor desarrollo. Para Troya fue su momento de mayor esplendor, tradicionalmente se ha pensado que o bien Troya VI o Troya VIIa serían de las que habló Homero en su inmortal Ilíada.

Hacia el 1600 a.C. en la Civilización Egea se produjo un punto de inflexión debido al surgimiento de la denominada Civilización Micénica, que rápidamente logró eclipsar a todas las demás con un sorprendente desarrollo. Fue ésta, como predecesora del mundo griego, la que logró finalmente unificar todo el mundo egeo en un único marco cultural bastante homogéneo, la Grecia Clásica

                                                                                        

Fundación Educativa Héctor A. García